Durante este 2024 las fiscalizaciones de Residuos Industriales Líquidos, RILes, registran un aumento de más de 54% en comparación al mismo período del 2023, siendo un resultado del trabajo liderado por el equipo del Programa de Fiscalización de RILes del Departamento de Gestión Ambiental de Aguas Antofagasta Grupo EPM.
La intensificación de las labores de inspección y la revisión de las instalaciones de los más de 130 recintos industriales de la región, han logrado la detección de riesgos sanitarios asociados al afloramiento de aguas servidas resultantes de las actividades, procesos o servicios que generan estos recintos y cuya disposición pueden provocar daños a la red de alcantarillado, obstrucción de las redes, rotura de tuberías, corrosión e incrustación, lo que conlleva a eventuales anegamientos de aguas servidas en la vía pública.
“Los RILes corresponden a descargas producidas por los procesos productivos de Establecimientos Industriales y de no ser dispuestos o tratados correctamente ponen en serio riesgo la seguridad ambiental y sanitaria de la población, ya que, producto de la acumulación de residuos como por ejemplo grasas y aceites, la probabilidad de una obstrucción mayor haciendo colapsar los colectores es altamente considerable”, señala Marcela Rodríguez, Jefa del Departamento de Gestión Ambiental de la empresa.
NORMATIVA
El Decreto Supremo Nº 609 de 1998 sobre la “Norma de Emisión para la regulación de contaminantes asociados a las descargas de RILES a sistemas de alcantarillado”, el “Procedimiento de Control y Fiscalización de RILES de las Concesionarias Sanitarias” y la Resolución N° 3447 de la Superintendencia de Servicios Sanitarios, habilita a Aguas Antofagasta para la fiscalización, inspecciones y/o monitoreos de la descarga de los Establecimientos Industriales para verificar el cumplimiento de la normativa. Es a través del Decreto Supremo que se definen los parámetros medibles entre los cuales en nuestra región predominan los referidos a aceites y grasas, hidrocarburos totales, sólidos y otros, cuya presencia y descarga en el sistema de recolección no está permitida.
Dentro de las sanciones aplicables y a las que se exponen los recintos infractores está la clausura de la unidad domiciliaria según se indica en la ley General de Servicios Sanitarios DFL Nº 382 del Ministerio de Obras Públicas, en su Artículo Nº45, por lo que desde la compañía hacen un llamado a respetar la reglamentación y procurar la disposición correcta de residuos ya que existen múltiples medidas de prevención, además de sistemas como cámaras desgrasadoras, cámaras separadoras de grasa y aceites o de decantación de sólidos.
Durante este año, las fiscalizaciones dieron paso a la clausura de la unidad de un local comercial de comida rápida y no se descarta que nuevos recintos puedan ser desconectados a la red atendiendo el riesgo sanitario al que exponen a toda la población.